Aunque me lo crea pero te diré que uno de los eventos deportivos que más he disfrutado ha sido sin duda la ceremonia de la primera Investidura Clase 2011 del Salón de la Fama del Futbol Mundial que se realizó en Pachuca, Hidalgo al igual que como hace unos 30 años cuando mi primer partido de futbol profesional en vivo, en León, Guanajuato, o como cuando acudí a mi primero Congreso de AIPS a Nueva York y la elección que participe en el 2009 en Milán y los Juegos Asiáticos 2010.
Por Raúl García Salguero – rbuzos@yahoo.com
De aquel primer partido les diré que se jugó por la noche y que por primera vez mis ojos observaban a todo color desde las gradas, era para ver en acción a mi paisano y portero del Unión de Curtidores Rubí Valencia, disfrutar de un partido del campeonísimo Chivas Rayadas del Guadalajara y ver como dirigía al equipo local en el estadio La Martinica el legendario Antonio «La Tota» Carbajal, después lo vi varias ocasiones dirigiendo al Morelia, el equipo de los michoacanos.
Años después he disfrutado de nuevo de gratos momentos de un banquete futbolero como esa ocasión en La Martinica de León, Guanajuato, ahora fue en Pachuca , la cuna de futbol y ciudad que no conocía, aquí otra vez ahí entre los protagonistas estaba La Tota Carbajal, a mi lado en el Auditorio La Gota estaba la Voz que ha narrado todo lo ocurrido en el estadio más famoso de México, Don Melquiades Sánchez Orozco «Perraco», y su esposa.
Y es que previo a la Ceremonia de Investidura, Jorge Che Ventura, un gran amigo de quien esto escribe me presentó con Don Melquiades «voz oficial del estadio Azteca» y lo primero que me dijo fue «Arriba los Xolos» y con su tradicional voz que durante más de 45 años ha retumbado en el Coloso de Santa Úrsula del DF me deleitó con su famosa frase «gol tutsi pop» y dijo que ha disfrutado de anunciar muchos goles el que más ha cantado es «gol anotado por Cuauhtémoc Blanco».
Un poco más allá Arlindo, el brasileño que marco el primer gol en el Azteca posaba para la foto y otorgaba autógrafos, unas bancas adelante el ex técnico de la selección mexicana, Miguel Mejía Barón, la familia de Hugo, un extraordinario ambiente para vivir uno de mis mejores eventos deportivos.
Hugo Sánchez saluda a Javier "Chicharito" Hernández. Dos generaciones de goleadopres del fútbol mexicano. Hugo ya está en el Salón de la Fama, Javier lo estará en una década más, seguro.
Pasada las 17:00 horas del 8 de noviembre comenzaron en serie los momentos imborrables, al micrófono dos jóvenes talentosos para conducir la entronización, Miguel Gurvitz de Televisa Deportes y Antonio Rosique de TV Azteca, vino el humo nacional y un documental sobre la grandeza del futbol, un mensaje del Presidente Felipe Calderón, otro de Joseph Blater, presidente de FIFA del Gobernador de Hidalgo
Ya en vivo, Antonio Moreno, Director Ejecutivo del Salón de la Fama el hombre que soñó este proyecto y hoy lo vio nacer, recordó el procedimiento de selección, agradeció a los periodistas que participaron en la selección de los primeros investidos y al Comité de honor, Lorena Ochoa, María Elena Servitje, Alejandro Martí, Arturo Elías Ayub, Agustín Irurita; Carlos Bremer, Ángel Losada, Marcos Achar, y Justino Compeán, Presidente de la Federación Mexicana de Fútbol y Testigo de Honor del Salón de la Fama.
José Manuel de la Torre, director Técnico de la Selección Mexicana de Fútbol, Guillermo Ochoa, actual portero de la Selección Mexicana de Fútbol, Giovani Dos Santos y Chicharito Hernández recibieron permiso de la Federación Mexicana para dejar la concentración del equipo para apoyar en la conducción a Miguel Gurvitz y Antonio Rosique.
Esos detalles de juntar a dos periodistas de cadenas opuestas y apoyados por seleccionados nacionales fue otro gran acierto de los organizadores ya que esto permitió ver el abrazo y saludo del Chicharito Hernández con el más grande de los futbolistas Mexicanos Hugo Sánchez fue sensacional.
No menos efusivo fue el mensaje de Antonio La Tota Carbajal que finalmente reconoció que sí es profeta en su tierra, ver llorar de alegría y felicidad a hombres fuertes, como Cabinho, Carlos Reinoso y la rivalidad que se tuvieron Reinoso con Enrique Borja fue cosa del pasado.
Otro momento que hizo llorar a varios de los mil 900 asistes a la ceremonia fue cuando Enrique Borja agradeció el apoyo de sus hijos y de su esposa Sagrario Baena que dejo una carrera de éxito como cantante para convertirse en la mujer de uno de los futbolista más queridos y serios de México.
Jesús Martínez presidente del Club Pachuca no podía ocultar la felicidad, se movía y acomodaba en la butaca, en la parte centro bajo el escenario la orquesta , la cámara apuntaba al público y se miraba en pantalla Miguel Mejía Barón, mientras Jorge Campos le agradecía la confianza que le brindó en sus inicios de su carrera.
Para la eternidad quedará lo que dijo el legendario Cinco Copas, Antonio La Tota Carbajal, recordó que un día en una entrevista afirmó que nadie es profeta en su tierra y ante los asistentes dijo «me arrepiento de haber dicho eso» porque la entrega de esta gente conocedora del futbol se le entrego y recordó a su esposa María Teresa ya fallecida y le agradeció por tanto apoyo que le dio en las derrotas y en las vitorias.
Las dos horas de la Ceremonia terminaron y continuaron los saludos en los pasillo y la plazuela, por ahí pude estrechar la mano de Hugo Sánchez, de Cardozo, Campos y de varios colegas asi como una lluvia de fuegos pirotécnico y el recorrido por la Gran Pelota , casa del Salón de la Fama del Futbol con un guía de lujo, se llama Jorge, le apodan Che y se apellida Ventura.
Antonio Carbajal, una leyenda. Jugó cinco mundiales consecutivos (entre Brasil 1950 e Inglaterra 1966) defendiendo el arco de México. Méritos de sobra para pertenecer al Salón de la Fama.
No quiero dejar pasar este espacio para agradecer el Che todas las atenciones, antes de viajar con él a Pachuca me invitó a una reunión de la Academia Mexicana de Tango, un bello grupo al que Jorge lo engrandeció, a la mañana siguiente pasó por mí al Hotel y antes de viajar a Pachuca, pasamos a la Basílica de Guadalupe para saludar a la Virgen de Guadalupe Reina de América donde miles de fieles la visitan todos los días, de ahí partimos a esta extraordinaria experiencia, conocer el Salón de la Fama consta de una galería con ambiente histórico futbolero desde que se jugaba sin reglas, la creación de las confederaciones, la evolución y el desarrollo que este deporte registró en el Siglo XX, un resumen muy bien logrado, después dos grande salas, una para futbol internacional y otra para el balompié nacional y la parte superior una cúpula interactiva con los nuevos 30 inmortales.
En las dos salas audiovisuales volvimos a ver parte de lo que se ofreció en la ceremonia de investidura, En el ambiente de lo internacional se volvió a sentir la magia que Pelé y Diego Maradona dejaron impregnada en la cancha; las gambetas que Garrincha y Johan Cruyff hicieron enloquecer a las hinchadas; la contundencia que Gerd Müller y Ferenc Puskaz dejaron cimbrando las redes; el liderazgo de Franz Beckenbauer, Mario Zagallo y Lothar Matthaus; la picardía que hombres como Michel Platini y Eusebio, tenían que emplear para vencer a gigantes del arco como Lev Yashin. La elegancia de Zidane y Bobby Charlton para bailar con la de gajos ante miles de aficionados. O el espíritu victorioso de la saeta rubia, Alfredo Di Stéfano.
En la sala audiovisual del futbol nacional De las glorias del futbol mexicano se revivieron escenas del «Campeonísimo» cuando se reconoció a Salvador Chava Rayes y Héctor Hernández; uno de los más aplaudidos fue Ignacio Trelles Don Nacho, y de Raúl Cárdenas; maquina goleadora de Cabinho y José Saturnino Cardozo.
Hay también se vibra con los goles, chilenas y pichichos de Hugo Sánchez, la maestría y derroche de técnica de Carlos Reinoso, las atajadas de Miguel El Gato Marín , la grandeza de Jorge Campos en la portería y en el ataque, la heroicidad de Horacio Casarín, los mundiales de México y los partidos más memorables de las selecciones nacionales sin faltar el gol mundialista de Manuel Negrete, y las mejores narraciones, todo eso fueron parte de las escenas que se vieron en el teatro y que los asistentes al Salón de la Fama pueden disfrutar cuantas veces quieran.
