Rompió dos veces su récord personal de envión y tres veces el de total, y se colgó las nueve medallas de oro del Sudamericano, Iberoamericano y Open de Cali de Levantamiento de Pesas, cumplido la semana última.
Por: Prensa Comité Olímpico Venezolano
Traducido por: Constanza Mora Pedraza
CARACAS, Venezuela, 16 de mayo de 2021.- Keydomar Vallenilla guardaba un triste recuerdo de su última subida a la plataforma, cuando se eliminó con tres levantamientos nulos en el envión de los 96 kg del Panamericano de Santo Domingo el mes pasado, pagando el precio de una apuesta que en ese momento pareció demasiado ambiciosa: buscar desde el primer intento su récord personal. El jueves en Cali demostró que estaba listo para eso y mucho más.
Vallenilla transitó por un torneo sencillo en el arranque del Sudamericano, Iberoamericano y Open de Cali de levantamiento de pesas, con cómodas alzadas de 165, 170 y 173, dos kilos por debajo de su mejor marca de por vida, el 175 con el que terminó su participación en República Dominicana.
La fiesta vino en el envión, donde abrió con un 202 que le garantizaba un récord personal en total, superando por un kilo el tope de 374 impuesto en los Juegos Panamericanos de Lima.
En su segunda salida, intentó un 207 inédito para él, que hasta entonces solo había llegado hasta los 205 de Lima, y al coronarla quebraba dos hitos personales más, en el doble movimiento y en el total.
Mientras tanto, el campeón olímpico iraní Sohrab Moradi había renunciado ya a seguir complicándole el escenario, luego de tres fouls en el arranque, y el héroe local, el campeón mundial juvenil Jonathan Rivas, era la gran ausencia del evento, debido a un leve problema físico.
El momento de la verdad llegó en el tercer intento, con las nueve medallas ya aseguradas. En Santo Domingo había fallado tres veces con la barra cargada con 210 kg, cinco por encima del que para entonces era su tope. En Cali cargó 211, cuatro más que su recién impuesto récord de por vida, y al concretar el levantamiento sus gritos de alegría fueron la evidente válvula de una celebración postergada por demasiado tiempo.
Al descender del podio en el que escuchó tres veces el himno nacional (una por cada modalidad), le colgó su dorada del total a su entrenador Henry Velásquez, como gesto de reconocimiento al hombre que lo ha llevado a ser campeón mundial menor, subcampeón mundial juvenil y bronce mundial adulto.
Vallenilla había retrocedido en el ranking de clasificación olímpica hasta una posición que le aseguraba el cupo panamericano a Tokio 2020, pero lo dejaba por fuera de la franja mundial. Cuando se consolide el escalafón a principios de junio, muy probablemente habrá regresado a la élite a la que siempre mereció pertenecer.
El Open de Cali es un evento de categoría Plata, la segunda que más puntos da para sumarse a la fiesta olímpica.—ENGLISH
GOLD REVENGE FOR KEYDOMAR VALLENILLA
He broke his personal clean and jerk record twice and his total record three times, and took all nine gold medals from the Suramericano, Iberoamericano and Open de Cali of Weightlifting
By: Venezuelan Olympic Committee Press
Translated by: Constanza Mora Pedraza
CARACAS, Venezuela, May 16, 2021.- Keydomar Vallenilla kept a sad memory of his last time at the platform, when he eliminated himself with three null lifts in the 96kg clean and jerk of the Pan American in Santo Domingo last month, paying the price of a bet that at the time seemed too ambitious: to seek his personal record from the first attempt. On Thursday in Cali he showed that he was ready for that and much more.
Vallenilla went through a simple tournament at the start of the Suramericano, Iberoamericano and Open de Cali of weightlifting, with comfortable lifts of 165, 170 and 173, two kilos below his best lifetime mark, the 175 with which he finished its participation in the Dominican Republic.
The party came in the clean and jerk, where he opened with a 202 that guaranteed him a personal record in total, surpassing by one kilo the limit of 374 registered at the Pan American Games in Lima.
In his second attempt, he tried an unprecedented 207 for him, as until then had only reached 205 in Lima, and by crowning it he broke two more personal milestones, in the double movement and in the total.
Meanwhile, the Iranian Olympic champion Sohrab Moradi had already given up on further complicating the scenario, after three fouls at the start, and the local hero, the youth world champion Jonathan Rivas, was the great absence from the event, due to a slight physical problem.
The moment of truth came on the third attempt, with all nine medals already secured. In Santo Domingo he had failed three times with the bar loaded with 210 kg, five kilos above, which was until then his top. In Cali he lifted 211, four more than his recently imposed lifetime record, and when the uprising was successful, his shouts of joy were the obvious valve of a celebration postponed for too long.
When he descended from the podium where he heard the national anthem three times (one for each modality), he hung his total gold medal on his coach Henry Velásquez, as a gesture of recognition to the man who has led him to be junior world champion, youth world runner-up and senior world bronze.
Vallenilla had fallen back in the Olympic qualification ranking to a position that assured him the Pan-American place in Tokyo 2020, but left him outside the world range. However, when the ranking gets consolidated in early June, he will most likely have returned to the elite to which he always deserved to belong.
The Cali Open is a Silver category event, the second that gives the most points to join the Olympic Games
