Por Javier Sabath González Vázquez (Puerto Rico) – Periodista Joven AIPS América
LIMA, Perú, 7 de agosto de 2019.- Dicen que después de la tormenta siempre sale el sol y eso es lo que está sucediendo con el béisbol de la Isla del Encanto. Luego de años de oscuridad, el rubio maravilloso se puso bravo, perdió la timidez y recuperó la confianza: el béisbol boricua está brillando.
Durante la pasada década el béisbol puertorriqueño pasó por mucho, desde una merma considerable en la cantidad de peloteros boricuas en las Grandes Ligas, hasta una prolongada sequía de campeonatos en la Serie del Caribe. Sin embargo, durante esta década ese escenario cambió. Puerto Rico es, nuevamente, una potencia del béisbol al nivel mundial. Las recientes hazañas de los embajadores del béisbol boricua en las Mayores, como los logros alcanzado por la Selección adulta así lo demuestran.
La novena de béisbol de Puerto Rico, dirigida por el exgrandesligas, Juan ‘Igor’ González, derrotó 6-1 a Canadá para conquistar la medalla de oro de los Juegos Panamericanos de Lima 2019, y de paso la primera medalla dorada de los boricuas en la historia del béisbol panamericano, quienes terminaron el torneo con foja perfecta de 6-0.
Este es el segundo título de mayor envergadura alcanzado por la escuadra puertorriqueña. En el 1951, conquistaron la Serie Mundial Amateur de Béisbol celebrada en México.
«Yo le doy gracias a Dios, la gloria y la honra al Señor, esto significa mucho para nosotros como equipo y como puertorriqueños que somos. Llevarle alegría a la patria es especial ya que estamos pasando tiempos difíciles, pero siempre que se cuente con Dios todo es posible. Estamos más que contentos y agradecidos con Dios. El ‘staff’ y los muchachos dieron el todo dentro de las líneas y logramos llevarnos el oro», indicó el dirigente de Puerto Rico, Juan ‘Igor’ González.
Esta es la séptima medalla para el béisbol puertorriqueño en los Juegos Panamericanos. Previamente, los hijos de la tierra de Agüeybaná habían ganado dos medallas de plata (Chicago 1959 y La Habana 1991) y cuatro medallas de bronce (Winnipeg 1967, San Juan 1979, Indianápolis 1987 y Mar del Plata 1995).
Igor indicó que el próximo paso para la novena de Puerto Rico será el Premier 12. «Vamos al Premier 12 en China. Ahora nos toca confeccionar el equipo con tiempo y a tratar de hacer lo mejor posible allá. La mira está puesta en Tokio», añadió el dos veces Jugador Más Valioso de la liga americana en el beisbol de las Mayores.
Además de Igor, la escuadra de Puerto Rico cuenta con varios peloteros que se tomaron sus cafecitos en el béisbol organizado de los Estados Unidos, entre ellos se destacan los veteranos lanzadores Orlando Román y Fernando Cabrera.
«Es un orgullo bien grande para uno, para nuestro país y para nuestro béisbol, porque de esto es que nosotros vivimos. Estamos dejándole saber a todo al mundo y a todo el pueblo de Puerto Rico, que el béisbol en Puerto Rico es muy bueno. Es un campeonato muy importante dada la situación que se vive en el país», expresó Orlando Román, quien ha formado parte del equipo de Puerto Rico en las cuatro ediciones (2006, 2009, 2013 y 2017) del Clásico Mundial de Beisbol, máxima competición de la disciplina al nivel global. «El próximo paso sería en el Premier 12 y la clasificación olímpica; tengo la confianza en que podemos clasificar», apuntó el veterano de 40 años.
Fernando Cabrera, al igual que Román e ‘Igor’, entiende que la mira está puesta en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. «Siguiendo este curso, y ya que el béisbol regresó a los Juegos Olímpicos, creo que la meta es Tokio 2020. Yo he podido ser parte de estas dos medallas de oro -Juegos Centroamericanos y del Caribe 2018 y Juegos Panamericanos 2019- y me gustaría intentarlo. Quisiera completar el ciclo olímpico representando a mi patria», aseguró Cabrera, quien formó parte de la escuadra que se alzó con el campeonato centroamericano en Barranquilla.
El derecho de 37 años jugó durante siete temporadas -2004 al 2010- en la gran carpa con los Indios de Cleveland, Orioles de Baltimore y los Medias Rojas de Boston, desempeñándose como relevista. Pero desde hace tres años participa en la Liga de Béisbol Superior Doble A de Puerto Rico, donde hizo la transición de relevista a abridor.
«El cambio de relevista a iniciador me ha ayudado, me he adaptado y me ha gustado. Yo no iniciaba hace muchos años. Regresé a inicial en la Doble A. y la liga me ha enseñado mucho, he hecho unos ajustes, me ha adaptado a esta nueva faceta -iniciador- y ha sido gracias a eso que he tenido la oportunidad de representar a Puerto Rico nuevamente», señaló Cabrera, quien fungió como el cerrador de la novena de Puerto Rico durante las ediciones 2009 y 2013 del Clásico Mundial de Béisbol, pero que quedó fuera del combinado que participó en el 2017. «Gracias a Dios he tenido la oportunidad de representar a Puerto Rico en muchos torneos, es una verdadera bendición y estar de vuelta más todavía», añadió.
De igual forma, Cabrera reconoce que gran parte del éxito obtenido por la Selección se debe al nivel competitivo que tiene la Liga de Béisbol Superior Doble A de Puerto Rico, y es que 20 de los integrantes de la escuadra boricua participan en ella.
«No seguía la Doble A, cuando estaba participando al nivel profesional, pero sí te puedo decir que el nivel ha subido porque es una combinación de peloteros aficionados -muchos de ellos con experiencia en el béisbol colegial- y profesionales. Nosotros (los profesionales) le sacamos lo mejor a los aficionados. Es una liga que va a seguir creciendo y cada vez van a haber peloteros de más calidad. Y es en estos torneos que queda evidenciado que ha subido el nivel, porque este equipo es una combinación de peloteros profesionales, que ya no juegan en Estados Unidos, pero juegan la Doble A, con jugadores aficionados», finiquitó muy entusiasmado por el futuro prometedor que proyecta la Liga.
Así que el resto del mundo está prevenido. Las ambiciones de los boricuas son grandes, quieren expandir su imperio beisbolero fuera del continente americano. Lo próximo: Juegos Olímpicos de Tokio 2020. ¿Podrán?
