Por Enrique Montesinos Delvaty – enriquemontesinos@gmail.com 

Río de Janeiro, Brasil, 17 de agosto de 2016.- Durante muchos años del pasado siglo XX se repitió que los Juegos Panamericanos eran la segunda competencia en importancia después de los Juegos Olímpicos. Todavía algunos lo creen.

El desarrollo deportivo en Asia hizo posible que al despuntar el presente siglo y milenio sus Juegos continentales nacidos coincidentemente también en 1951 se fueran por encima de los Panamericanos en número de países y atletas contendientes, así como en cantidad de pruebas y medallas disputadas.

Por si no bastaran dichas cifras cuantitativas, al apelarse a resultados cualitativos se llega a la misma conclusión. El medidor ideal son los Juegos Olímpicos por enfrentarse en los mismos lo mejor del planeta.

Desde Atenas 2004, pasando por Beijing 2008 hasta Londres 2012, los asiáticos han estado delante que los americanos en el medallero.

Los argentinos Santiago Lange y Cecilia Carranza en el centro de los premiados en velas, nacra 17.

Y ahora con los Juegos asentados en América, ¿ha cambiado la correlación de fuerzas?

Al completarse la jornada del miércoles 17, apenas a cuatro para la terminación de los Juegos de la XXXI Olimpiada Río 2016, un total de ochenta países figuran en la tabla de medallas frente a los 85 que lograron al menos una de bronce en la anterior cita de Londres 2012.

De jueves a domingo estará en disputa alrededor del 20 por ciento que resta del total de premios y es muy posible que sea superada la cifra de países medallistas de hace cuatro años debido a la masificación cualitativa experimentada por el deporte en todos los continentes.

Por cierto, la estadística de la Web Río2016, señala a Europa de líder en la conquista de medallas con el 47 por ciento de las mismas en poder de los países que la integran. Gran Bretaña, Rusia, Alemania, Francia e Italia constituyen su quinteto de vanguardia entre los ocho primeros de la tabla.

Los europeos tienen más premios que Asia y América. El continente asiático acumula el 23 por ciento, con China, de momento, en el tercer escalón gracias a faenas dominantes como la que arrasó con los cuatro títulos del tenis de mesa, y en clavados, donde ha ganado cinco de seis disputados.

América cuenta con Estados Unidos (30-32-31=93) para encabezar el evento con holgadas ventajas de 11 oros y 43 en total sobre el segundo lugar de Gran Bretaña, 19-19-12=50.

No obstante ese sólido dominio, el continente americano marcha en tercer lugar, con el 21 por ciento de las medallas distribuidas como consecuencia del discreto acompañamiento. El quinteto que le siguen solo aporta 14 oros: Jamaica, cuatro (lugar 15); Brasil, tres (17); Canadá, tres (19); Cuba, dos (22); y Colombia, dos (25).

Elaine Thompson (JAM) se adelantó a su compatriota Bolt y ya es reina de la velocidad femenina.

Este miércoles Elaine Thompson regaló a Jamaica y a toda América el título de la más sobresaliente velocista femenina al sumar el oro en los 200 metros planos al ya alcanzado en los 100 metros para lo cual tuvo que vencer también a la favorita holandesa Dafne Schippers. También en el estadio Engenhao Estados Unidos impresionó al conquistar cinco de seis medallas en dos pruebas femeninas. Hizo la tripleta en 100 metros con vallas y el uno-dos en salto de longitud.

Otras contribuciones en las últimas horas en el medallero de América corrieron a cargo de los veleristas argentinos Santiago Lange y Cecilia Carranza, segundo oro para el país en la modalidad mixta nacra 17.

El oro en los 400 metros planos para Bahamas por intermedio de Shaunae Miller, quien así dio la primera medalla a su país nada menos que frente a la laureada Allison Felix. Y felicitaciones para República Dominicana, que también inauguró el medallero con el bronce de su taekwondoka de 58 kilogramos, Luisito Pie.

Claro que los cómputos finales pueden mejorar por el parejo accionar de Estados Unidos en todos los deportes, la fuerza jamaicana en los relevos, los boxeadores de Cuba y la ciclista colombiana Mariana Pajón, por citar a los más evidentes.

Lo que nadie duda es que los atletas más encumbrados de los Juegos son de América, el nadador estadounidense Michael Phelps quien sumó cinco de oro a sus repletas arcas como el más ganador de la historia olímpica en todos los deportes. Y el bólido Jamaicano Usain Bolt, primer humano en concretar tres victorias olímpicas consecutivas en los 100 metros planos y quien se apresta a engrandecer la proeza añadiendo los 200 metros y el relevo 4×100.