Raúl García Salguero – rbuzos@yahoo.com
Tijuana, México, 2 de julio de 2016.- El 2 de julio de cada año se considera el Día Internacional del Periodista Deportivo para recordar que en 1924 se creó la Asociación Internacional de la Prensa Deportiva (AIPS, por sus siglas en francés), con la finalidad de establecer una hermandad que permita además de fomentar la amistad, impulsar acciones de capacitación, desarrollo y profesionalización se defiendan los derechos de los cronistas deportivos y puedan cubrir en libertad todo acontecimiento deportivo.
El presidente de AIPS, el italiano Gianni Merlo en un mensaje en ingles que difundió en la página de esta organización con sede en Lausana, Suiza, comenta que la celebración llegó cuando el deporte pasa por una terrible tormenta. El año olímpico no ha traído tranquilidad, pero ha visto escándalos surgen inquietantes. El dopaje y la corrupción de todo tipo están saliendo a la superficie todos los días.
Estamos volviendo a descubrir que, en el pasado, los altos directivos, entrenadores, directivos, médicos, atletas y otros directivos de deportes han logrado enmascarar sus actos ilegales muy bien, manteniendo su imagen pública limpia y de esta manera, permitieron que la falta de honradez de contaminar el mundo del deporte aún más profundamente, porque se convirtieron en los ejemplos a seguir para aquellos que siempre han querido atajos para alcanzar el éxito.
Considera que ahora Rusia está bajo fuego, pero esto podría ser sólo el primer capítulo de un libro negro del deporte que va a terminar la participación de muchos otros y que los periodistas deportivos tienen el deber de actuar y contribuir a la búsqueda permanente de la verdad.
Refiere que no hay que olvidar la importancia de nuestra búsqueda cuidadosa de prueba e indicios de negligencia y no debemos tener ningún reparo ante la conducta criminal de las principales amenazas para el deporte que también pueden ser letales para la profesión del periodista deportivo.
El mensaje de Giani Merlo lo cierra con una reflexión y exhorta a a los periodistas deportivos a defender la integridad y la libertad de expresión para ayudar a alejar el mundo del deporte de esta crisis moral y material que por momentos parece que nunca termina.