Los ganadores del Premio Nacional de Deportes 2012 se tomaron la fotografía oficial con el presidente Enrique Peña Nieto.

El presidente Enrique Peña Nieto, entregó el  Premio Nacional de Deportes y al Mérito Deportivo 2012, en ceremonia realizada en el Salón Adolfo López Mateos de la Residencia Oficial de Los Pinos.

Los galardonados fueron: la arquera Aída Román, el nadador paralímpico Gustavo Sánchez, la selección olímpica de futbol, la juez Naomi Valenzo, así como los entrenadores Luis Fernando Tena y José Peláez, recibieron el Premio Nacional de Deportes, mientras que la taekwondoín María del Rosario Espinoza, por su trayectoria, y Nelson Vargas Basañez, en su carácter de promotor, obtuvieron el reconocimiento al Mérito Deportivo.

Peña Nieto celebró el hecho de iniciar sus actividades al frente del Poder Ejecutivo ante quienes por su dedicación, ejemplo, disciplina y coraje, han puesto el nombre de México en alto, además de subrayar que el deporte será prioritario durante su administración, por lo que buscará que el país inicie una nueva etapa en la que la sociedad participe desde distintas trincheras para consolidar esta tarea.

El Primer Mandatario apuntó que, tanto en el deporte como en la vida, hay que prepararse para ganar, lo cual implica aprovechar todo lo bueno que se ha conseguido, pero también mejorar y transformar con esto al país.

A los galardonados, el Presidente de la República les dijo ser un vivo ejemplo de lo que se puede lograr para ser una potencia deportiva, lo cual se alcanzará con una planeación adecuada más allá de un sexenio, pero sin descuidar la responsabilidad de cada momento.

En el  acto protocolario también estuvieron el secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet Chemor; del director general de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, Bernardo de la Garza, así como del presidente del Comité Olímpico Mexicano, Carlos Padilla Becerra; el titular de la Confederación Deportiva Mexicana, Alonso Pérez González y el presidente de la Comisión de Juventud y Deporte en el Senado, Carlos Alberto Puente Salas.

El director técnico de la Selección Nacional de Futbol Sub-23, Luis Fernando Tena, agradeció el Premio, en la categoría de Entrenador e invitó a continuar con los éxitos internacionales.

«Tenemos mucha satisfacción, mucho agradecimiento y compromiso con nuestras Selecciones Nacionales por su entrega y esfuerzo», expresó Tena Garduño, quien al recibir el reconocimiento escuchó un breve mensaje personal del Presidente.

«Nos agradeció el haber hecho vibrar a México con los resultados de los Juegos Panamericanos y de los Juegos Olímpicos; sabemos del compromiso con los niños y jóvenes del País para darle un buen ejemplo a la sociedad, de la responsabilidad de seguir dando alegrías, pero en especial de dar muestras de actitudes ejemplares para la sociedad», agregó.

Por su parte Nelson Vargas agradeció recibir el primer Premio Nacional al Mérito Deportivo 2012, en el rubro de Fomento o Impulso de la Práctica de los Deportes, galardón que lo impulsa a continuar en esta actividad.

«Tengo aún grandes proyectos con los que quiero ayudar a México, entre ellos la creación de un Centro de Alto Rendimiento en Rancho San Juan; ya tengo el terreno y ahora a empezar la construcción, estoy dejando allí un esfuerzo muy grande porque quisiera que esté listo para 2015 y que en 2017, antes del Campeonato Mundial FINA de Guadalajara, Jalisco, todos los nadadores del mundo que así lo deseen puedan hacer un último campamento de preparación allá, pero también que pueda servir para los mejores nadadores de las acuáticas», comentó Vargas Basáñez, quien recibió el Premio Nacional de Deportes en dos ediciones anteriores (1978 y 1982).

Vargas considera como el mayor legado de su carrera cambiar el concepto de la natación, de ser un deporte elitista a una actividad para todos.

«En la década de los 60 yo empecé a trabajar en el Instituto Mexicano del Seguro Social y allí se dio la creación de más de 60 centros deportivos para diferentes usuarios; antes de eso sólo en los clubes deportivos se podía nadar o en balnearios lejanos donde la gente tenía que pagar por poder nadar los fines de semana; creo que aprovechar ese empuje y darle vida a la natación para todos fue algo muy especial», finalizó.