El Arte de la Guerra, obra maestra del general chino Sun Tzu, es un influyente libro sobre estrategia y táctica militar que se redactó aproximadamente 400 años antes del nacimiento de Jesucristo. En el mundo moderno avanza la tecnología, la mecánica, y la ciencia, pero el deporte no es la excepción.
Por Julio Bonnín – julio.bonnin@abc.com.py
Empleemos pequeñas frases de esta maravilla literaria, al deporte.
Sun Tzu dice: «El arte de la guerra se basa en el engaño». El deporte dice: «El arte de la victoria se basa en la práctica».
Sun Tzu dice: «Si utilizas al enemigo para derrotar al enemigo, serás poderoso en cualquier lugar a donde vayas». El deporte dice: «Jugaremos de local, tendremos ventaja. Iremos de visitante, será complicado».
Sun Tzu dice: «Si conoces a los demás y te conoces a ti mismo, ni en cien batallas correrás peligro; si no conoces a los demás, pero te conoces a ti mismo, perderás una batalla y ganarás otra; si no conoces a los demás ni te conoces a ti mismo, correrás peligro en cada batalla». El deporte dice: «El técnico (estratega) debe prever todo y hacer una análisis profundo de su rival antes de ir a enfrentarlo. Conócelo bien, con sus virtudes y defectos, victoria asegurada. Confía en tu potencial, e ignora al que está enfrente, a veces triunfarás, otras no. No sabes lo que tienes, y tampoco a lo que
te enfrentas, ¡Hasta luego!».
Pequeñas frases y comparaciones que nos ponen a pensar, ¿Será este libro el ABC de los directores técnicos, empresarios o estrategas?. ¿Como un plan militar puede encuadrarse a las exigencias y realidad deportivas?
Pues las respuestas la encontrarás en el campo de juego. Donde los guerreros alistados por el Comandante saldrán a dar hasta el último aliento por llevarse la gloria. Esa victoria tan anhelada, que si la consiguen, serán héroes, pero si fracasan, serán fusilados. Gladiadores con armaduras indestructibles, su sed de éxito y amor propio.
O en caso contrario, atiendan las palabras del periodista y escritor portugués, José Saramago (que en paz descanse): «Todo el mundo me dice que tengo que hacer ejercicio. Que es bueno para mi salud. Pero nunca he escuchado a nadie que le diga a un deportista; tienes que leer».
