Por Enrique Montesinos Delvaty – enriquemontesinos@gmail.com

Río de Janeiro, Brasil, 16 de agosto de 2016.- Desde que Duncan McNaughton ganó el desempate a Bob Van Osdel, de Estados

El canadiense Derek Drouin devolvió a América el título de salto de altura.

Unidos, y al filipino Simeon Toribio, todos vencedores de la varilla situada a 1.97 metros de altura, Canadá no conquistaba una medalla de oro masculina en este salto.

Fue conquistada hace 84 años en Los Ángeles 1932, primera y única hasta que este martes 16 de agosto en los Juegos Olímpicos Río 2016 Derek Drouin convirtió sueño en realidad y el país de la hoja de maple volvió a subir lo más alto del podio.

Drouin no es ningún improvisado. Obtuvo bronce en la edición olímpica anterior de Londres 2012, con 2.29, volvió a broncearse en el Mundial de Moscú 2013, con 2.38, y es el actual campeón mundial de Beijing 2015, con 2.34. A sus 26 años ha añadido a su palmarés el cetro olímpico, con 2.38, su mejor marca de la actual temporada.

Interesante resulta que haya logrado retornar hacia América la corona de esta especialidad después que Javier Sotomayor (2.34) y el estadounidense Charles Austin (2.39) las obtuvieran seguidamente en Barcelona 1992 y Atlanta 1996.También llama la atención que continuaron vigentes las primacías de aquellos, la mundial de 2.45 del cubano y la olímpica de Austin.

¿SE OLVIDARON DE LOS RECORDS?

En ningún otro ciclo olímpico como el de 2013-2016 se había amenazado tanto la primacía impuesta por el llamado Príncipe de las Alturas en 1993.

La explosión fue en el año 2014 cuando después de una sequía prolongada de estrellas en la prueba, nada menos que un quinteto de saltadores accedió al impresionante muro de 2.40 en una docena de ocasiones, varias de ellas culminadas con intentos no exitosos sobre 2.45 y 2.46.

El catarí Mutaz Essa Barshim, 2.43 y 2.42, el ucraniano Bohdan Bondarenko (2.42) y el ruso Ivan Ukhov (2.41) encabezaron el progreso amenazador, secundados por otro ucraniano, Andriy Protsenko, y el propio canadiense Drouin, ambos con 2.40. Creció la expectación.

En el ruedo olímpico carioca todos estaban este martes, menos el ruso debido a la suspensión de su Federación. Entonces, en el momento culminante ninguno salta al máximo logrado.

El catarí no pudo con 2.38 y quedó plateado en 2.36. El ucraniano Bondarenko renunció al 2.36 y le salió mal porque falló dos veces en 2.38 y buscó el tercero en 2.40 en un obligado postrer esfuerzo. Bronce con 2.33, igual altura que la de Protsenko, cuarto lugar

Ya campeón en 2.38, Drouin vio la varilla solicitada en 2.40 por su rival y solamente le dedicó un intento antes de despedirse. No pareció interesarle el primado olímpico. Mucho menos el mundial. Vaya usted a saber por cuál causa. Los otros ni se acercaron.

Sotomayor estaba invitado para comentar en la televisión. Pero igual estaba Michael Johnson trabajando para la BBC y el sudafricano Van Niekerk fue despiadado con su marca.

FALLECIO JOAO HAVELANGE

Imagen histórica de los polistas brasileños en Buenos Aires 1951. De pie, a la extrema izquierda, Joao Havelange

El fallecimiento de Joao Havelange se produce en mitad de los Juegos Olímpicos en cuya obtención de la sede por primera vez para Brasil y Sudamérica aportó su granito de arena desde las importantes tribunas que ocupaba en el COI y en FIFA.

En su discurso de la sesión del COI en Copenhague en 2009 invitó a celebrar su cumpleaños número cien en Río. Desde julio estaba internado como consecuencia de una pulmonía.

Havelange vivió 100 años dedicado al deporte. Con satisfacción lo descubrimos al hurgar en la historia de los Juegos Panamericanos como jugador de polo acuático del equipo brasileño medalla de plata en los I Juegos Buenos Aires 1951. Primero había sido nadador y representó a Brasil como tal en los Juegos de Berlín 1936.

Cuando perdió las facultades de velocidad que exige la natación pasó al polo

En el que volvió a representar olímpicamente a Brasil en Melbourne 1956.

Fue presidente de la FIFA 24 años desde 1974 cuando sustituyó a Stanley Rous, hasta 1998 en que dio paso a Sep Blatter.

Durante el desempeño del cargo tuvo muchos éxitos y el estadio olímpico utilizado en 2007 como panamericano recibió su nombre, aunque posteriormente colocaron una estatua del famoso futbolista Nilton Santos en su entrada principal y aparece en muchos lugares como estadio olímpico a secas. Havelange renunció en 2013 como presidente honorario de la FIFA luego de ser acusado oficialmente de recibir sobornos.

Integró el Comité Olímpico Internacional desde 1963 hasta 2011, cuando dejó la entidad deportiva por salud, aunque también estaba siendo investigado por la Comisión de Ética del COI.

Sin embargo, el momento de la muerte de un hombre que vivió un siglo dedicado al deporte no resulta propicio para referirse a sus errores.

Es un momento de homenaje por sus aportes y de condolencias a sus familiares.